Si te gusta el café y acostumbras a tomarlo en una buena cafetería, seguro que en más de una ocasión te ha dado pena darle el primer sorbo. Puede que hasta en un mal día te hayas encontrado una cara sonriente entre la espuma de la leche y le hayas dado las gracias al camarero. Pues bien, esa es la respuesta a qué es un barista: quien sabe convertir una taza de café en una experiencia única.
Seguro que lo primero que te ha venido a la cabeza cuando has oído o escuchado la palabra barista es una varita mágica o un showman tras la barra de un pub agitando la cocktelera. Seguro que no has podido imaginar que fuera un término ligado a la preparación del café.
Pero así es, el barista es un genio del café, un profesional dedicado a la preparación de bebidas a base de expresso. Una bonita profesión que os queremos descubrir hoy desde Cafés Baqué.
Qué es un barista y por qué es importante en la preparación de un café
Como decíamos, el barista es un profesional de la preparación de café, un profesional de la hostelería que tras la barra convierte una simple taza de café en una experiencia formidable. De hecho, su principal talento reside en conocer a la perfección la técnica de preparación de café y en cada taza consigue plasmar una obra de arte.
Probablemente, estarás pensando que es un camarero como cualquier otro, pero no lo es. Un barista es mucho más, ya que es él también quien crea nuevos y diferentes cócteles basados en el café, utilizando diferentes tipos de leche y licores.
El barista debe revisar, lo primero de todo, la calidad del café en función de su origen, tipo de tueste, método de elaboración, etc. Por si fuera poco, también tiene que revisar el agua, su temperatura, la frescura del café, la emulsión de la leche o el punto molido, entre muchos otros factores determinantes para un buen café.
De hecho, el café es la única bebida que realmente hay que transformar en la cafetería. Un barista hace grande ese momento de la última fase de producción: convertir un objeto sólido en una bebida agradable y equilibrada.
Y como remate final, el barista decora la taza de café con la técnica de Latte Art. Para realizar su diseños recurre al flujo de la leche desde la jarra o dibuja con un punzón sobre la espuma. Un talento que nos trasmite su pasión por el mundo del café y la taza bien servida.
¡Así da gusto tomar un buen café!
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